Ernesto Vespignani
Nació en Lugo, Ravena, el 7 de noviembre de 1861, en el hogar de Eugenio Vespignani y Magdalena Bartola. Proveniente de una familia cristiana, de la cual salieron varios religiosos: una carmelita, dos hijas de María Auxiliadora y cuatro Salesianos.
Mientras Ernesto cursaba sus estudios en Turín, su hermano sacerdote José partió como misionero hacia Argentina. Don Bosco, por su parte, observó el interés de Ernesto por el dibujo y la arquitectura, y lo alentó para que estudiara Diseño en la Academia Albertina donde se graduó como arquitecto en 1879. Se había vinculado con renombrados profesionales y artistas del Piamonte y estudió arquitectura clásica, especialmente estilos eclesiásticos. Diez años después, se ordenaría como sacerdote salesiano.
Su primera obra, fue la Capilla en Valsálice, en las afueras de Turín donde estuvo algunos años la tumba de Don Bosco, allí proyecta algunas características que serán constantes en su obra: utilización del ladrillo, que dejará a la vista, policromía, incorporación de pequeños elementos escultóricos. También proyecta una división de los usuarios de la iglesia: feligreses y alumnos de la institución, que usará después en varias de sus obras. También el uso del azul para las bóvedas, a semejanza de un cielo estrellado.
En 1900 llega a Buenos Aires convocado por su hermano José para dirigir la construcción de la Basílica de María Auxiliadora y San Carlos Borromeo. Con él trasladó su Oficina Técnica de Arquitectura, para proyectar y dirigir las edificaciones salesianas que se estaban multiplicando en Argentina, este funcionó donde actualmente se encuentra el Pío IX.
En 1905 la Sociedad Central de Arquitectos exigió tener el título habilitante argentino para poder asociarse, poder trabajar en nuestro medio. Ernesto Vespignani, humildemente, rindió cada uno de los exámenes y revalidó su título en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Buenos Aires. Por ello fue reconocido como Miembro Titular de la misma y durante años el Arquitecto Vespignani desarrolló permanente actividad.
En 1903 y 1906 regresó a Italia para buscar mármoles, lámparas y distintos ornamentos y hasta mano de obra experta en cemento armado para estructurar la cúpula de la actual Basílica.
En 1907 iniciaba las obras de otra iglesia católica, que acompañó la celebración del centenario: la basílica del Santísimo Sacramento, neo románica, diseñada en Paris por Coulomb & Chauvet por especial encargo de Mercedes Castellanos de Anchorena, quien donó totalmente su construcción. El arquitecto Ernesto Vespignani dirigió la obra, que fue concluida en 1916. La misma generosa donante le encargó el proyecto y ejecución de la Iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes, en Echeverría 1371, en el barrio de Belgrano.
Participó como profesional en la dirección de obra, especialmente en hormigón armado y techos en la Catedral de La Plata y la Basílica de Luján.
Ernesto Vespignani construyó y participó en la construcción de importantes iglesias de Argentina, así como también de otros países de América Latina como Uruguay, Perú y Bolivia.
Fuente: https://buenosaireshistoria.org/juntas/ernesto-vespignani-el-arquitecto-de-dios/