Ruta provincial N°43, a 95 Km de Chos Malal
La novena y fiesta de San Sebastián se celebraba en casas de familia de esta zona desde fines de 1800. La devoción llegó desde Chile con los que venían a poblar estos lugares o que viviendo aquí cruzaban la cordillera para comercializar sus productos. Los primeros misioneros realizaron los primeros bautismos y luego dejaron “licenciados” chilenos, que era gente del lugar con permiso para bautizar.
Alrededor del año 1942 visita la zona el padre Marcelo Pío Gardín, salesiano, que fue iniciador de muchas de las capillas en el norte del Neuquén. En 1944 pone una Cruz en un cerrito y se forma una comisión de gente del lugar para empezar una capilla. Fue edificada con barro, carrizos, piedras y otros materiales de la zona. Medía 14 por 6 metros. La construcción estuvo a cargo de los mismos pobladores que colaboraron con trabajo y dinero.
La imagen de San Sebastián se trae desde Chile (primero en tren y luego en lomo de mula) y es entronizada en 1946. Se hizo una colecta para adquirirla en la que cada familia aportaba 40 centavos.
En enero de 1962 cuando don Jaime de Nevares hizo su primera visita a San Sebastián, celebró las “misas, comuniones, confirmaciones, casamientos, en esa pequeña capilla del bajo”; el padrecito Obispo acompañaba cada año la fiesta.
En el año 1977, siendo párroco el padre Isidro Belver, se inició la construcción del actual santuario, cerca de la Cruz, y que se inauguró en 1981.
Cada año un gran número de peregrinos se acerca a Las Ovejas, el norte neuquino. Ya desde el día 11 de enero, cuando comienza la novena. El santuario tiene un predio grande, con extensos pinares, en el que muchas familias eligen acampar. Los peregrinos llegan en sus autos, colectivos, caminando o en bicicleta, como un modo de pagar su promesa al santo.
Otra forma muy tradicional de pagar las mandas es con ofrendas de carne (de chivo o vacuno), puesto que los crianceros ponen sus piños bajo la protección del santo y prometen dar algún animal para la fiesta. Con eso se hace un el asado del día 20 ofrecido a todos los peregrinos.
En los días de la novena y el mismo 20 se realizan tres tandas de bautismos. Es muy emocionante para descendientes de los primeros pobladores que ya no viven en Las Ovejas traer a bautizar a sus hijos a este lugar.
En estos días de enero llegan entre 10.000 y 12.000 peregrinos. Cifra considerable si se tiene en cuenta que el pueblo tiene 1800 habitantes permanentes. Muchos se alojan en casas de familiares, otros en cabañas de alquiler y en el camping municipal.
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